La semana pasada hablamos de Hardbone, una de las bandas de hard rock más importantes salidas desde la ciudad alemana de Hamburgo. Sin embargo, Hamburgo nos ha legado mucho más. Otra de las bandas de mayor calidad nacidas allí es Iron Angel. Eso sí, Iron Angel nació muchísimos años antes que Hardbone: en el año 1980 bajo el nombre de Metal Gods, el primer formato de la banda durante sus inicios. Un nombre que fue extraído de una de las canciones de Judas Priest. Las influencias estaban bastante claras.
Iron Angel
Hoy Iron Angel está considerada una de las bandas alemanas de speed metal más respetadas. Sobre todo el primer episodio de la banda hasta finales de los años ochenta. Y es que los miembros de Iron Agel pusieron punto y aparta a la actividad de la banda hasta 1999, cuando decidieron sorprendentemente reunirse y dar vida a un nuevo álbum de estudio que jamás llegó a publicarse. En el artículo de hoy vamos a repasar varios de sus trabajos como excusa para conocer más de estos practicantes natos del speed metal. ¡Síguenos!
Iron Angel – Power Metal Atack
Power Metal Atack fue el primer trabajo lanzado por los músicos de Hamburgo. Corría el año 1984, durante el principio del fin de la explosión del speed metal, cuando los alemanes decidieron publicar este disco, con un sonido claramente amateurizado, pero muy pero que muy fresco. Algunas de sus canciones, como Rush of Power o Wife of the Devil, son auténticas maravillas para los oídos. Una de esas bandas no tan populares que los más curiosos del metal conocerán. Pero la discografía de Iron Angel acababa de empezar.
Iron Angel – Hellish Crossfire
Power Metal Atack fue la primera piedra en el camino. Una demo que los puristas amantes del sonido sucio amarán incondicionalmente. Sin embargo, el primer álbum de estudio de Iron Angel fue Hellish Crossfire. El trabajo que los puso verdaderamente en el mapa. Un disco cargado de adrenalina, de caídas en picado y de dosis de machaque sin freno. Una definición perfecta del speed metal con ambientes tanto del heavy metal como del thrash metal. Para muchos, y nos incluimos, el mejor trabajo de los alemanes.
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Iron Angel – Winds of War
Siempre lo hemos dicho. Sacar un discazo debut es muy complicado. La inmensa mayoría de bandas no son capaces de conseguirlo. Sin embargo, lo más difícil de todo es estar a la altura en el segundo álbum cuando lo has conseguido en el álbum debut. Las expectativas y las presiones crecen. Winds of War de Iron Angel fue esa continuación y estuvo a la altura. Quizá no con la fiereza y contundencia de Hellish Crossfire, pero se puede escuchar con sumo placer y descubrir preciosas maravillas en su interior. ¿Qué mas necesitamos?
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Iron Angel – Rush of Power
En 2004 la banda de Hamburgo decidió grabar un álbum en directo. Un sueño de toda banda de metal que se precie. La sensación de conexión con el público, la energía de lo instantáneo y la espontaneidad dan unas texturas y un sabor diferentes a la música. Titulado Rush of Power, en honor a una de los temas de la demo debut, es un trabajo interesante con muchas dosis de genialidad. No obstante, queda bastante lejos de esos dos primeros trabajos de estudio. No se puede tocar el cielo permanentemente. Ni siquiera Iron Angel.
Iron Angel – Hellbound
Como mencionamos anteriormente, la discografía de Iron Angel debía haberse prolongado con aquel disco que tenían en mente cuando se volvieron a reunir en 1999: The Rebirth. Pero no fue así. En su lugar, fue una obra titulada Hellbound la que dio continuidad al trabajo de los alemanes. Un álbum a medio camino entre el speed metal y el heavy metal, con trazas thrash, que se encuentra para nosotros en lo más alto de la obra de Iron Angel junto con Power Metal Atack.